Algunos textos sobre la ancianidad

 

 1.-  BÍBLICOS

“Levántate en presencia del anciano, honra sus cabellos blancos, y así honrarás a tu Dios” (Lv 19,32).

“Los cabellos blancos son una noble corona que consiguen lo sque vivien honradamente” (Pr 16,31).

“La fuerza es el honor de los jóvenes, y los cabellos blancos son la gloria de la ancianidad” (Pr 20,29).

“Escucha a tu padre, pues él te ha engendrado. No menosprecies a tu madre porque sea anciana” (Pr 23,22).

“Hijo mío, acoge a tu padre cuando sea anciano, no le entristezcas mientras viva. Si pierde el conocimiento sé comprensivo. No le trates con menosprecio tú que estás en la plenitud de tus fuerzas” (Sir 3,12-13).

“No menosprecies al  anciano, que también nosotros envejeceremos” (Sir 8,6).

“No rehúses lo que cuentan los ancianos, ya que ellos aprendieron también de sus padres. De ellos aprenderás a tener juicio y a dar respuesta cuando sea necesario” (Sir 8,9).

“Donde haya ancianos, no hables demasiado” (Sir 32,9).

“La ancianidad honorable no es la de los largos días ni se mide por el número de años. La prudencia es la verdadera ancianidad, y la vida sin tacha es la honrada vejez” (Sb 4, 8) .  

“Aunque uno viva setenta años, y el más robusto hasta ochenta, la mayor parte son fatiga inútil, porque pasan deprisa y vuelan” (Sal 90,10).

“En la vejez seguirá dando fruto, y estará lozano y frondoso para proclamar que el Señor es bueno” (Sal  92, 15,16).

“No riñas a un hombre de edad, exhórtalo como si fuera tu padre” (1 Tim 5,1)

“Que los ancianos sean sobrios, dignos, sensatos, sanos en la fe, en la caridad, en la paciencia y en el sufrimiento. Que las ancianas sean también en su porte cual conviene a los santos, para que enseñen a  las jóvenes…” (Tit 2, 2-5).

     

  2.-  CITAS CÉLEBRES

 “La vida empieza a los setenta años” (Confucio).

“Una bella ancianidad es, de ordinario, la recompensa a una bella vida” (Pitágoras, 582-497 a.C.)

“No ha de ser dichoso el joven, sino el viejo que ha vivido una hermosa vida” (Epicuro, 341-270 a. C.).

“El peso de la edad es más leve para el que se siente respetado y amado por los jóvenes” (Cicerón).

“En la boca del viejo todo lo bueno fue y todo lo malo es” (Baltasar Gracián, 1601-1658).

“Nada nos hace envejecer más que el pensar incesantemente que nos hacemos viejos” (Georg Christoph Lichtenberg, científico alemán, 1742-1799).

“Envejecer es como escalar una gran montaña. Mientras se sube, las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena” (Schopenhauer, 1788-1860).

“La vejez conduce a una tranquilidad indiferente que asegura la paz interior y exterior” (Anatole France, 1844-1924).

“El arte de envejecer bien es el arte de conservar esperanzas” (Andre Maurois, 1885-1962).

“El secreto de una buena vejez no es otra cosa que en pacto honrado con la soledad” (Gabriel García Márquez).